Si Sonia Pierre es dominicana debería comportarse como una dominicana. Son más los haitianos ilegales que residen en la República Dominicana, que los residentes legales. Los haitianos en este país trabajan en la construcción, en las fincas agrícolas, en los ingenios de caña de azúcar, ofrecen servicios domésticos, estudian en las universidades y se desempeñan como comerciantes informales, en las calles y avenidas de la provincia de Santo Domingo y otras ciudades. Cada año miles de haitianas cruzan la frontera dominico haitiana a parir en los hospitales públicos dominicanos y son atendidas sin inconvenientes. Niños haitianos mendigan en las calles y avenidas de la República Dominicana.

Un ejemplo, de esos es que un niño de 11 años de edad dormía en el parquesito del cruce de la avenida 27 de Febrero con la carretera de Manoguayabo, cuando lo cuestionaban sobre sus padres decía que su mamá (haitiana) lo dejó abandonado. La Constitución Dominicana establece quienes son dominicanos, y hasta que no sea modificada no se puede hacer lo contrario dándole la nacionalidad a quienes no le corresponde. La activista pro haitiana, Sonia Pierre, advirtió que la Junta Central Electoral dendrá que demostrar que su acta de nacimiento es irregular. Resulta, que no sólo es irregular la acta de nacimiento de Sonia Pierre, sino de otras personas dominicanas, haitianas y de otras nacionalidades.

Todas las anomalías descubiertas en las actas de nacimientos deben ser aclaradas y corregidas, sin importar quienes son las víctimas. Eso de que una supuesta dominicana este andando por organismos internacionales procurando sanciones en contra de la República dominicana da muchos de que hablar. Si Sonia Pierre es dominicana debe demostrarlo con los hechos y comportarse como una dominicana. Si Sonia Pierre es defensora de los haitianos, debería tratar de ayudarlos h con acciones muchos más beneficiosas Por ejemplo, debería coordinar con la embajada haitiana una jornada para dotar a todos los haitianos sin acta nacimiento de su documento, para que así puedan solicitar su residencia en la República Dominicana.

Lo único que a los dominicanos le molesta de los haitianos es el mal olor a sudor, cuando se juntan en los carros y los autobuses de transporte público.

Sonía Pierre debería desarrollar una jornada con los fabricantes de desodorantes para que le den muestras gratis a los haitianos, porque son potenciales consumidores.