Tener un techo propio es tener la mitad de las necesidades de supervivencia resueltas.
Lo cierto es hay personas que dejan techos abandonados para ir a vivir a otros lugares, dónde no tienen ni una cobija.
En el mismo por ciento que aumenta la población de personas aumenta la demanda de espacios habitacionales.
Cada persona quiere estar en su espacio individual para tener privacidad, dormir paz. Pensar en paz.
No queremos invasores en nuestros espacios, compartir habitación es muy incómodo, hasta para los esposos, quienes por más que se quieren sienten la necesidad de no tener a nadie cercas.
Quieren dormir con las luces apagadas.
Hasta las respiraciones les molestan.
Muchos se preocupan para no llegar a viejos sin casas. Es desde antes de ser adulto hay que pensar como será nuestra casa. El día que nos separemos de la casa materna.
Queremos estar cómodos con nuestra familia., Pero la realidad nos da en las caras por los altos precios de los alquileres.
¿Has pensado dónde estará ubicada tú casa, dentro de 10 años?
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